Una inversión millonaria para promocionar un cartel con una figura del toreo que no necesita promoción y tiene todo el papel vendido nada más salir a la venta las entradas. Y la inversión la hace el propio torero. Una locura se mire por donde se mire. Y una lección, si se mira bien.
El anuncio "Se hace camino al andar", producido (o sea, pagado) por el propio Talavante es todo un aviso a navegantes. Es un paso hacia delante para un sector que se empeña no ya en anquilosarse, sino incluso en ir hacia atrás. Porque en el toreo, dentro y fuera del ruedo, todo lo que no sea cruzar la línea de lo seguro hacia lo desconocido es quedarse fuera de cacho.
Lo que ha hecho Alejandro Talavante promocionando su gran reto de la temporada —y podríamos decir que de su carrera, al menos hasta hoy— es lo que tendrían que hacer los empresarios de Las Ventas (estos, los anteriores y los futuros) cada San Isidro. Los de Sevilla cuando llega abril. Los de Valencia en Fallas. Y así todos. Que Talavante lo dijo muy clarito: "invertir en una campaña de publicidad es un paso para conseguir que se hable de toros en los informativos".
Pero claro, a Talavante no le duele rascarse el bolsillo. Y el resto no ve más allá de la taquilla de cada tarde. Y —de nuevo— así nos va.
[Publicado en Cultoro.]
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