"La pérdida de interés por un piso que había comenzado a visitar con entusiasmo, o por un libro que había abierto con pasión, me sumía en la confusión. Lo peor, con todo, fue el descubrimiento de que puede ocurrir lo mismo con la vida. Un día, de súbito, ya no quieres abrir más puertas ni leer más capítulos. Y te mueres sin saber si la culpa fue tuya o de la puta vida. O de los dos".
Juan José Millás, "Desconcierto", en El País.
Qué gran comunicador es Millás. Reflexiones profundas con apariencia de pequeñas frases.
ResponderEliminarBesos.
Querido apesardemi, creo que das en el clavo de la grandeza: ser capaz de hacerla invisible ante la apariencia de lo cotidiano. Es el discreto y al tiempo grandioso encanto de la difícil facilidad.
ResponderEliminarBesos.